¿Tiene un origen cultural el independentismo catalán?

Para entender la situación en la que se encuentra el conflicto español-catalán hoy en día, es necesario echar la vista atrás. 

Felipe V, de la familia de los borbones, se convierte en rey tras una guerra de sucesión entre él y Carlos III, el cual había sido apoyado por los catalanes.  Esta oposición catalana no gusto nada a Felipe V y cuando los vence el 11 de septiembre de 1714, ordena abolir las instituciones de autogobierno de Cataluña y el castellano pasa a ser la única lengua oficial. A pesar de estar prohibido, se sigue hablando catalán y se potencia su uso en las calles, lo que aviva un sentimiento nacionalista que hace que surja el catalanismo político.

A finales del siglo XIX Barcelona mira hacia Europa, se transforma y expande, adopta los cambios propulsados por la Revolución Industrial y progresa hacia una sociedad moderna. Culturalmente también se experimentan muchos movimientos en literatura, música o arte. Es un momento muy activo en el que se produce una fuerte transformación cultural y destaca, sobre todo, la renovación de los valores catalanes a través del movimiento denominado Renaixença.

La Renaixença fue un movimiento cultural en algunos territorios de habla catalana y valenciana que llega a su esplendor durante la segunda mitad del siglo XIX. Su nombre surgió de la voluntad de hacer renacer el catalán como lengua literaria y de cultura después de los siglos de diglosia respecto al castellano.

Con la proclamación de la segunda república en España, Cataluña vive las mayores libertades. Pero con la dictadura de Franco llegan las mayores represiones, persigue y asesina a todo aquel que piense diferente a su régimen. El catalán fue prohibido, las instituciones abolidas, y los políticos e intelectuales fueron encarcelados, fusilados o exiliados.

Cuando Franco muere, llega la transición a la democracia, y con ella la constitución de 1978.

En 1979, Cataluña recupera su estatuto de autonomía. El catalán se convirtió en lengua oficial en escuelas y ayuntamientos de Cataluña, y la Generalitat pasó a gestionar los intereses de los ciudadanos.

En resumen, la historia de Cataluña está marcada por la lucha contra el poder centralizador de Madrid, sobre todo a partir del siglo XVII. La voluntad de autonomía de los catalanes fue apoyada por el crecimiento económico y por el avance sobre el resto de la Península, y fuertemente alentado por la represión del franquismo.

En los últimos años ha ganado mucha fuerza en Cataluña la idea de que la independencia es la mejor opción para construir un país más transparente y justo. Pasa a convertirse en una idea de una minoría a una opción política real.
Y la pregunta es: ¿se llegará a un acuerdo entre el gobierno de España y el de la Generalitat?